Miércoles de Ceniza

Me encontraba yo en la parada del autobús rumbo al Burger Kill que está a un lado del estadio Sergio León Chávez (Una sincerísima disculpa si ese no es el nombre del estadio pero es que jamás he podido recordar si en realidad se llama así el "otro" estadio que está "justo" a un lado...). Y para mi suerte me tocó esperarlo con una pareja que parecía no importarle si pudiesen escucharlos.

Si de algo me quejo de mi padre es que tiene el súper poder de decir las cosas más incomodas en el lugar menos indicado con el volumen de voz más alto que sea humanamente posible. ¿Un ejemplo? No sé... quizá ir caminando por Liverpool tranquila mente y de la nada soltar un "¡Ah, si, te faltan boxers!"...
¡Killing me softly with these words!

En fin... mi historia.

Parecían discutir de algo, que en primer lugar tomé por el mal sentido:
Chica - Ándale, hace un buen rato que no lo hacemos.
Chico - No, mi amor. Neta no es bueno.
Dejando de lado mi mal pensamiento, razoné un poco... O es una mujer con voz de hombre un hombre con voz muy afeminada... o es el primer hombre que soy testigo que rechaza una propuesta de sexo...

Ya después de un rato de platicar y platicar del asunto, justo cuando podía ver el camión acercándose, el sujeto decidió dejar las cosas en claro:
Chica - Ash ¿¡Por qué no vamos a mi casa por sexo!?
Chico - ¡Que no, amor! ¡¡Hoy no se come carne!!





Llegué tarde por dejar pasar el camión...
Es que en cuanto subieron comencé a cagarme de risa.